miércoles, 13 de octubre de 2010

Perdido

PERDIDO

Me diste del fruto y comí y comí

Por qué lo hiciste?

Por qué me hiciste comer de tu carne?

Por ti perdí mi desnudez y mi paz!

Maldito soy por probarte

El dolor de tenerte me seguirá todos los días de mi vida.

martes, 20 de abril de 2010

10 CUENTOS PARAQUITOS

10 cuentos paraquitos

Introducción

Este cuento es el primero de 10, escritos durante mi ya larga reclusión, todos tratan de historias ficticias y algunas reales que tienen como protagonistas a internos miembros de los grupos paraestatales.

I.
Cochebala

Cuando Gregorio Castañeda descubrió que Cochebala era Eliecer Remón Orozco, se sorprendió tanto y le dió tanto miedo que casi se infarta, ambos estaban en la cárcel La Sin igual, él acusado de corrupción administrativa, el mas corrupto de la ciudad dijo un diario local al registrar la noticia de su captura y éste de homicidio y paramilitarismo.

Eran iguales, delincuentes, los delitos por los cuales los acusaba la fiscalía los colocaba justo en el mismo nivel y podían hablar entre iguales.

Gregorio se percató del nombre verdadero de Cochebala un día cualquiera, estando en la oficina de derechos humanos del penal, lugar donde aquel trabajaba brindándole asesoría legal a los demás presos, trabajo que le servía para descontar medio día de prisión por cada uno de atención, en caso de una hipotética condena.

Estando allí sentado en su escritorio recordando su época de burócrata profesional, entró Cochebala y le dijo:

- viejo necesito que me ayude a redactar una petición dirigida a la oficina de reinserción porque hace cuatro meses no me entregan el subsidio y no le he podido mandar dinero a mi mujer y hay que pagar los servicios públicos y el colegio de los pelaos, Uribe ordena una cosa y los burócratas hacen otra! por eso es que los matan!.

Gregorio le elaboró el documento y al final le preguntó el nombre de pilas a lo que Cochebala respondió:

- me llamo Eliecer Remón, Remón Orozco.

- Remón Orozco!, espetó Gregorio sorprendido.

-Ese nombre me trae recuerdos poco agradables;-dijo.

- y eso porqué. Preguntó Cochebala.

-De que se acuerda, qué le hice?.

A lo que Gregorio contestó:

- te voy a contar, resulta que hace unos 5 años estuve en la unidad de vida de la fiscalía asistiendo en indagatoria a un señor que había matado a un ladrón en defensa propia y el secretario del fiscal al saber mi nombre me dijo, doctor Gregorio en estos días apareció su nombre en una diligencia judicial.

- y eso? -Le preguntó- resulta, narró el funcionario judicial, que durante un allanamiento de la policía a una casa en el barrio El Santuario, capturaron a dos sicarios y uno tenía una agenda en la que aparecía escrita una lista compuesta por los nombres de diez personas y una de ellas es usted, suponemos que se trata de una lista para sicariar a abogados, servidores públicos, intelectuales y sindicalistas, si me espera le regalo una copia de la diligencia para que mire que hace, al observar la copia vi mi nombre, el de nueve activistas mas y el del supuesto sicario y el de éste era Remón Orozco, nunca se me olvidó ese nombre por lo raro, pensé que se habían equivocado y que era Ramón y no Remón.

Después de escuchar el relato Remón exclamó:

-usted estaba en esa lista viejo?

- Si, replicó Gregorio.

-Está vivo de vainas,viejo y eso porque me detuvieron antes de cumplir toda la orden, los otros nueve estan muertos!, órdenes son órdenes, te salvaste de milagro viejo, dijo Remón.

-Hoy no se que es peor si estar muerto, asesinado por paracos al servicio del Das, como Alfredo Correa, o estar preso por orden de ellos mismos, de cualquier forma me jodieron.

Pensó Castañeda.

domingo, 28 de febrero de 2010

ME VERAS

ME VERÁS

Cuando tu rostro veas, me verás, me reflejaré en tus ojos y volverás la mirada para no mirarme, verguenza te dará.

Mirarás tu cuerpo tibio y me verás reflejado en él, bajarás la mirada, verguenza te dará.

Mirarás la tierra que pisas y me verás, la aplastarás y me verás.

En el sitio donde duermes me verás, en el auto que Conduces me verás,en el aire que respiras, me verás.

En todas partes me verás, como a Dios,en todas partes.

Aunque no exista, como Dios, me verás en todas partes.

viernes, 19 de febrero de 2010

victoria

Victoria

Aún te siento en mi, como el primer día.
Qué difícil es expulsarte, sacarte, extraerte.

Eres como una sustancia letal, como un vicio, te daña y lo deseas, como un vicio.
Al final venceré
no necesitaré nada, solo tierra.